El estudio de las obras de los grandes maestros y mis años como Copista en el Museo del Prado me han proporcionado una gran experiencia.
Una copia de una gran obra no se limita a reproducir con fidelidad sus formas si no que precisa del uso de las mismas técnicas que al artista le permitieron conseguir esos tonos y texturas , utilizando la veladura, pintura por capas, etc.